Prueba: Casco Dexter Electron

Debido al creciente número de motos trail y maxitrail en el mercado, la demanda de cascos con visera (elemento indispensable en el código vestimentario de este tipo de máquinas) es cada vez más importante. Dexter responde admirablemente con su modelo de casco Dexter Electron.

El casco Dexter Electron visto de cerca

Dexter demuestra una vez más su inteligencia al proponer un producto a un precio agresivo, pero sin escatimar en las prestaciones. Los amantes de los cascos de trail y, por qué no, de supermoto, o incluso aquellos que simplemente busquen un estilo característico, estarán sin duda contentos de descubrir que, para regalarse un casco para moto, no están obligados a vaciar la cuenta de ahorro destinada a los estudios de los niños.

El casco Dexter Electron puede adquirirse a un precio más que razonable. Ese es, sin lugar a dudas, su principal argumento a favor. Pero ser barato no basta para ser bueno. Saquemos a la carretera este casco integral para descubrir lo que hay detrás de esa calota color negro mate. Por cierto, es el único color disponible.

Comodidad

Su comodidad se mueve dentro de una media más bien alta. Las espumas interiores son rígidas, a fin de proporcionar un buen ajuste del casco a la cabeza. Esta rigidez debería ser una garantía de durabilidad. No hay nada peor que las espumas que se compactan a las primeras de cambio y terminan haciendo que el casco flote sobre la cabeza. El revestimiento de estas espumas resulta suave y agradable al tacto. Permite que la piel no se irrite, aunque llevéis el casco todo el día.

El cierre es de tipo micrométrico. No cabe duda de que es menos preciso que una anilla doble D, pero también resulta más práctico en el un uso cotidiano. Sobre todo si lleváis guantes.

Luz

Al estar provisto de una pantalla de gran superficie, el campo de visión del casco Dexter Electron es bastante amplio. En cualquier caso, entra dentro de la horquilla superior de lo que habitualmente ofrecen los cascos integrales. Es algo que se agradece, sobre todo si se utiliza en modo urbano, es decir, en las situaciones donde el motero tiene mayor necesidad de controlar todo lo que pasa para garantizar su seguridad.

Esta pantalla principal ofrece una carrera sin posiciones intermedias. Puede parecer sorprendente a primera vista, pero si uno está acostumbrado a un casco de este tipo, no es algo que resulte realmente molesto. Lo que sí me cabreó bastante es que la única pestaña que permite la manipulación esté ubicada en la parte central inferior de la pantalla. Cuando la pantalla está bajada, no cuesta atraparla, pero la cosa cambia cuando está arriba del todo. ¡Prácticamente toca la visera, y así es muy difícil acceder a ella! Y si encima lleváis unos guantes gruesos de entretiempo o de invierno, ya ni os cuento…

Para terminar con la pantalla principal, que sepáis que el Pinlock viene de serie. Un gran punto a favor en comparación con otros cascos, a menudo mucho más caros, que no lo incluyen. Por no hablar de aquellos que ni siquiera son compatibles. El Pinlock se suministra por separado en la caja de embalaje. Pero su montaje en la pantalla tan solo os llevará unos minutos, incluso siendo unos negados con dos manos izquierdas, como yo. Más complicado será desmontar la pantalla (y la visera), para lo cual necesitaréis un destornillador.

Probé el Pinlock en unas cuantas mañanas bien fresquitas de principios de otoño, las típicas en las que el vaho hace su aparición en los cascos. Su eficacia fue irreprochable. Me hubiera gustado probarlo también bajo la lluvia, pero el tiempo no dio pie a ello. De todas formas, no veo por qué tendría que responder peor con lluvia que con frío.

El casco Dexter Electron también está equipado con un visor solar interno. Puede decirse que está bien dimensionado, ya que baja bastante sin llegar a tocar la nariz. Su manipulación resulta muy fácil gracias al pulsador en el lado izquierdo del casco. En cambio, su tintado me pareció demasiado claro. Si tenéis los ojos sensibles, seguramente debáis seguir utilizando gafas de sol durante el verano. Máxime cuando, por ahora, no existe ninguna pantalla ahumada disponible para el Electron.

Ruido

El mayor defecto de los cascos baratos suele ser su insonorización deficiente. Con la pantalla levantada, el casco Dexter Electron no hace milagros. Pero, si la cerráis por completo, el nivel acústico se vuelve mucho más aceptable. De todos modos, hay que tener siempre presente que, con la mayoría de los cascos del mercado, en trayectos largos y a velocidad constante, conviene utilizar tapones de oídos para preservar la audición a largo plazo…

Por último, para mi sorpresa, y pese a la presencia de esa imponente visera en la parte superior del casco, los ruidos aerodinámicos no resultan exagerados. Eso sí, evitad levantar la vista para mirar a los pajarillos mientras conducís, porque el aire golpeará fuertemente contra la visera y tirará de vuestro casco, dándole de paso una sacudida a vuestras cervicales…

Aire

En lo referente a la ventilación, los dispositivos ajustables se han reducido a su mínima expresión en el casco Dexter Electron. Solo hay una toma de aire prevista a la altura del mentón. Se acciona mediante un botoncito que se desplaza en sentido vertical (apertura de la toma de aire en posición alta). Otro botón situado en el interior de la mentonera permite regular la dirección del flujo de aire: o bien hacia la cara (botón hacia arriba), o bien hacia la pantalla del casco. También hay dos pequeñas entradas de aire justo encima de la junta superior de la pantalla. Y, para terminar, dos extractores en la parte trasera de la calota. Un poco justo para un casco solo disponible en negro.

Y, ya que hablamos de aire, os habréis fijado en que el casco Dexter Electron no tiene barbillera. Ni siquiera como accesorio. Así pues, preparaos a recibir ráfagas de aire ascendente. Bajo el sol de verano, puede que resulte agradable, pero, en invierno, debéis prever un pasamontañas o, como mínimo, un cubrecuello que suba lo suficiente para protegeros del frío.