Protección suprema del motorista contra las lesiones causadas por una caída o una colisión, el airbag para motos ha recorrido un largo camino desde sus inicios, hace casi 25 años. Hoy en día se ha convertido en un producto hipertecnológico y conectado que se democratiza cada vez más: los fabricantes se esfuerzan por ofrecer soluciones fáciles de usar y que garanticen un nivel de protección cada vez mayor.
Hoy os propongo analizar el modelo propuesto por Rev’it: el chaleco airbag Rev’it Avertum, desarrollado en colaboración con Alpinestars. Después de un mes en su compañía, ¿con qué me quedo de este chaleco airbag autónomo? ¿Cómo se posiciona en este segmento del mercado tan particular? ¿Y en qué se diferencia de la competencia? A continuación mi análisis para que te hagas una idea más clara.
¿Una decisión complicada?
Si me sigues aquí, en mis redes o en mi blog, sabrás que soy un gran admirador de todas las tecnologías que han aparecido en el mercado en los últimos diez años para hacer más seguro el motociclismo. Sin embargo, para que nos convenzan del todo, este tipo de tecnologías deben, en mi opinión, cumplir con un criterio fundamental: no generar molestias o problemas adicionales durante su uso.
Además del tema del precio, que también es un obstáculo importante, también son las limitaciones impuestas por las soluciones de airbag existentes desde finales de los años 90 (¡sí, ya!) las que han hecho que este tipo de protección nunca se haya adoptado del todo.
Breve historia del airbag de moto
Desde las primeras generaciones de chaquetas airbag activadas por un cable conectado a la moto, hemos pasado a los airbags de segunda generación, activados por un módulo que va instalado en la moto. Airbags radiocontrolados, pues, siguiendo el ejemplo de Ducati y Dainese, que incluso trabajaron de forma conjunta para presentar esta solución de serie en la Multistrada 1200S D-Air en 2014. Mejor, por tanto, pero todavía imperfecto porque iba vinculado a una sola moto. Esto también implica la necesidad de cambiar el material de una moto a otra. Así que seguía habiendo demasiados problemas.
Las cosas mejoraron notablemente con la llegada progresiva de los llamados airbags “autónomos” a mediados de 2010. En Helite, por ejemplo, o en algunas chaquetas o cazadoras muy caras como la Dainese Misano en 2016. La misma que tuve la oportunidad de probar para escribir la guía de compra de airbags en tu web favorita.
La llegada del airbag inteligente
Pero no fue realmente hasta finales de 2018, con el sistema In&Motion, que los chalecos airbag autónomos como el Ixon U03 se democratizaron un poco más. Funcionaba gracias a un algoritmo de detección de accidentes, desarrollado después de varios meses de colaboración con cientos de motociclistas en Francia y finalmente tuvimos un sistema eficaz y poco molesto de llevar y de usar. La guinda del pastel es que, por fin, es un sistema que se puede llevar debajo de la chaqueta. Y, por tanto, no estropea el look del motero… ¡Lo cual es de vital importancia para muchos, digan lo que digan!
Desde el punto de vista económico, Ixon e In&Motion tuvieron también la buena idea de sortear el problema del elevado precio vendiendo el chaleco “desnudo”, con la electrónica en pseudo leasing. Una solución que ha gustado mucho y ha hecho del U03 todo un éxito.
Y es exactamente en este momento de la historia cuando llega por primera vez al mercado del airbag para motos Rev’it con su chaleco Avertum. El fabricante ha entendido perfectamente los diferentes obstáculos que presenta un airbag en la moto, por lo que viene a presentarnos su solución.
Chaleco Airbag Rev’it Avertum: la solución técnica de Alpinestars
Consciente de que el desarrollo de una nueva solución electrónica para airbags autónomos no entra dentro de sus competencias, Rev’it ha decidido trabajar junto a Alpinestars. El fabricante transalpino es, efectivamente, todo un referente en la materia… Llevan trabajando más de 10 años en este tema, desde el desarrollo del airbag Tech-air Street, comercializado en 2014.
Por lo tanto, encontraremos todo este saber hacer en el chaleco airbag Rev’it Avertum. La experiencia en competición de Alpinestars también queda patente, ya que el chaleco cuenta además con un modo Race, del que hablaré más adelante.
Inteligencia artificial para protegerte
Un algoritmo de detección de accidentes, basado en la inteligencia artificial, tiene en cuenta los valores enviados por los 3 giroscopios y los 3 acelerómetros varias miles de veces por segundo. Esta IA utiliza los datos de conducción y de accidentes recopilados por cientos de motociclistas durante el desarrollo de las tecnologías Tech-Air en los últimos años, para determinar en qué contexto y en qué momento preciso la parte electrónica debe desplegar el chaleco.
Si se cumplen las condiciones, el gas contenido en el cartucho se libera, y el despliegue total de la protección se realiza en 40 milisegundos. Es uno de los tiempos de despliegue más cortos del mercado. A modo de recordatorio, la colisión del piloto con un obstáculo se produce generalmente unos 90 ms después de la caída. Esta es la razón por la que se considera necesario un tiempo mínimo de despliegue de 80 ms. ¡Con sus 40 ms, este chaleco airbag Rev’it Avertum es ideal!
En el modo Street, el chaleco está diseñado para activarse en una colisión a partir de 25 km/h. Sin embargo, por debajo de esta velocidad, el airbag puede activarse si se produce una caída brusca después del impacto.
Por último, en mi opinión, la mayor ventaja del chaleco airbag Rev’it Avertum, además de su tiempo de despliegue, son las zonas del cuerpo protegidas: hombros, torso, costillas y toda la espalda quedan cubiertos. Lo cual es un gran avance, especialmente en lo que respecta a la protección de los hombros, que normalmente están muy poco protegidos con los airbags de la competencia.
Una aplicación smartphone para la configuración
El chaleco airbag Rev’it Avertum puede comunicarse con tu smartphone a través de una conexión Bluetooth. La conexión se realiza a través de la aplicación AlpineStars Tech-air disponible en Android e iOS.
El emparejamiento se realizará escaneando, directamente desde la aplicación, un código QR ubicado en el chaleco, en la parte inferior de la nuca. Una vez emparejado, la aplicación, fácil de usar, te permite comprobar el nivel de batería restante y el estado del sistema, así como configurar el modo de conducción.
Hay dos modos disponibles: un modo Street y un modo Race. El modo Street para la conducción en carretera será el más utilizado, ya que el modo Race solo debe activarse durante el uso en pista. En este modo, el algoritmo utilizado es diferente, y el chaleco solo se activará a altas velocidades durante aceleraciones o frenadas bruscas (deben alcanzarse los 100 km/h para que el sistema se encienda).
El modo Race se beneficia de toda la experiencia de Alpinestars en el mundo de la competición y evita activaciones accidentales en este contexto. En cambio, no garantiza que el airbag se despliegue correctamente cuando se utiliza en carretera, por ejemplo, en un accidente a baja velocidad. Así que hay que tener cuidado para elegir el modo adecuado a cada situación.
Batería, carga y actualización del software
La batería tiene una duración de unas 30 horas. La carga completa se realiza en poco menos de 4 horas a través del puerto micro USB situado en la parte superior del sistema. Es un detalle menor, pero es una pena no haber optado por un puerto USB-C, que se está convirtiendo en la norma. Además, se suministra un cable con punta magnética con el chaleco, así como un cargador y diferentes adaptadores para usar en todo tipo de enchufes eléctricos si te vas de viaje.
La aplicación Tech-air también cuenta con un sistema de registro de trayectos. Desafortunadamente, no hay (¿hasta la fecha?) ninguna conexión posible entre este sistema y una aplicación de terceros. Al igual que los airbags equipados con la tecnología In&Motion con LibertyRider. Un sistema de este tipo llevaría la seguridad pasiva un paso más allá, alertando automáticamente a los servicios de emergencia tras un accidente.
Por último, la aplicación permite actualizar el firmware (un mini programa) del chaleco. Y, por lo tanto, algoritmos de detección de accidentes que están en constante desarrollo.
Sin embargo, ten en cuenta que la conexión al smartphone no tiene que ser permanente para el correcto funcionamiento del Avertum. Este es completamente autónomo y está configurado en modo Street por defecto.
Un chaleco que cumple con las últimas normas de seguridad
Como era de esperar, el chaleco airbag Rev’it Avertum cumple con la normativa europea EU 425/216 Cat I sobre equipos de protección individual (EPI) para usar en moto.
Este chaleco incluye varios tipos de protección, por lo que se aplican las siguientes normas:
- EN 1621-4:2013 – Ropa de protección contra impactos mecánicos para motociclistas – Parte 4: Protectores inflables para motociclistas.
- EN 1621-2:2014 – Ropa de protección contra impactos mecánicos para motociclistas – Parte 2: Protectores de espalda para motociclistas. El chaleco airbag Rev’it Avertum dispone de un protector de espalda homologado de nivel 1 independiente del airbag.
Para unificar estas normas, Rev’it ha creado un nuevo certificado utilizando la norma EN 17092 – 6:2020 Class CU. El “CU” significa Cover Under para definir una protección completa que va debajo de otra prenda de moto. De hecho, el Avertum por sí solo no ofrece protección contra la abrasión, por ejemplo.
De momento, el Avertum aún no se ha sometido a las pruebas de la SRA para confirmar su nivel de seguridad. Pasar por este tipo de laboratorio independiente con un protocolo estricto ofrece una garantía adicional apreciable, incluso si la tecnología Tech-air ya ha demostrado su eficacia. Algo a tener en cuenta.
Una cuestión de comodidad
Como decía al principio de este artículo, es importante que un chaleco airbag de este tipo, que se lleva debajo de una chaqueta, sea lo más cómodo y menos restrictivo posible. En el caso del Avertum, Rev’it ha conseguido hacer el modelo más cómodo de todos los que existen actualmente en el mercado.
Tanto en la parte del airbag como en la electrónica, AlpineStars ha demostrado su experiencia, mientras que, en la parte de la prenda propiamente dicha, Rev’it ha puesto en práctica todo su saber hacer.
Fabricado casi en su totalidad con tejidos Mesh ya utilizados en el resto de la gama del fabricante, el Avertum es muy cómodo de llevar. Las partes más expuestas o en contacto con la piel están confeccionadas con tejidos de neopreno microperforado. Respecto al protector de espalda, presente en el chaleco, se ha creado con una estructura de nido de abeja que permite que el aire circule libremente.
En resumen, es muy flexible y muy ventilado, cómodo de llevar y relativamente ligero. La mayor parte del peso corresponde a los infladores y al propio sistema de airbag. El peso del chaleco en la talla L es de 1,8 kg. Mi chaleco de prueba, de la talla 2XL, pesa unos 2,2 kg.
El chaleco se cierra con una cremallera muy segura, con cierre magnético. Basta con cerrar la solapa del pecho para activar el sistema y ponerse en marcha. Cuando el sistema detecta que llevas más de 10 segundos conduciendo (modo Street), el airbag se enciende. Más sencillo imposible.
Recuerda dejar espacio para el airbag en tu chaqueta
La primera pregunta que viene a la mente sobre un chaleco airbag para llevar debajo de la chaqueta o cazadora de moto es la del espacio necesario para el correcto despliegue del mismo. No querrás una chaqueta demasiado entallada para usar un airbag…
Lo ideal es que haya 4 cm de espacio entre la chaqueta y el chaleco airbag. Si necesitas comprarte una chaqueta nueva, es muy sencillo: escoge una talla por encima de tu talla habitual.
Mantenimiento necesario
Rev’it ofrece un servicio de mantenimiento y revisión para su chaleco airbag Rev’it Avertum.
Atención, a diferencia de otros sistemas, el Avertum requiere pasar por un distribuidor después de cada activación. En el primer despliegue, si el airbag no está dañado, se realizará un simple cambio de cartucho. A continuación, serán necesarias varias revisiones.
La revisión básica, no obligatoria, se recomienda cada 2 años o 500 horas de uso. Su coste es de 104,95 €, e incluye:
- Limpieza del forro
- Comprobación electrónica
- Actualización del software
- El airbag se prueba en su totalidad
- Volver a montar el sistema y comprobar su funcionamiento
Tras las dos primeras activaciones, es necesario sustituir los infladores. Este tipo de revisión tiene un coste de 189,95 €, e incluye:
- Comprobación electrónica
- Actualización del software
- Airbag probado en su totalidad
- Sustitución de los infladores
- Volver a montar el sistema y comprobar su funcionamiento
Para terminar, el último tipo de revisión debe realizarse a partir de la tercera activación. Cuesta 314,95 € e incluye:
- Comprobación electrónica
- Actualización del software
- Sustitución del airbag
- Sustitución de los infladores
- Volver a montar el sistema y comprobar su funcionamiento
Ten en cuenta que este mantenimiento lo realiza Rev’it en los Países Bajos. Esto es una ventaja respecto a los mantenimientos realizados por las marcas italianas, a menudo más lentos.
El tema del precio
En cuanto al precio, Rev’it no ha optado por la suscripción/leasing para su chaleco Avertum. De hecho, el precio de venta al público de 699 € puede parecer elevado a primera vista… Sin embargo, si lo comparamos con el coste total de un modelo de la competencia con suscripción a 3 años, el Avertum es igual de competitivo. ¡Y eso sin contar las diferentes ofertas que tienen a menudo los distribuidores!
Sin embargo, debes tener en cuenta el precio de los posibles mantenimientos en función de tu uso y de las posibles activaciones del sistema.
Es un hecho, el precio de un airbag de moto sigue siendo un freno importante. Pero si decides dar el paso, este es uno de los modelos con mejor relación calidad/precio. Especialmente porque, en el caso del Avertum, tendrás (¿por fin?) una solución eficaz en términos de seguridad y la menos molesta de usar.
Ver la ficha de producto
Gracias a Guillaume de Rev’it por responder a todas mis preguntas.
Gracias a Catherine y Julie por las fotos.
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