El cubrepiernas scooter es cada vez más habitual en las maxiscooter. Sin embargo, puede representar un engorro para la comodidad a gran velocidad. Tucano Urbano ha tratado esta cuestión desarrollando el Termoscud Evo, un cubrepiernas estudiado especialmente para estas condiciones. ¡Nosotros lo hemos probado!
La estación es la adecuada… ¡Nunca se agradece tanto un cubrepiernas como en pleno invierno! Por eso hemos decidido presentaros uno de los buques insignia de lo que os proponemos para equipar las maxiscooter: el cubrepiernas Tucano Urbano Termoscud. Más allá del acabado de gama alta, hemos querido poner a prueba su sofisticado sistema antiflameo. Para que nuestras conclusiones sean realmente convincentes, hemos montado el Termoscud en una Yamaha T-Max 530.
Manta Cubrepiernas Termoscud con S.G.A.S. 2.0, un sistema bien pensado
Primera observación: el montaje no merece ninguna crítica. Sin ser excepcionalmente sencillo, no resulta más engorroso que el de un una manta térmica cubrepiernas “estándar”. Una buena noticia, ya que podríamos pensar que un producto anunciado como especialmente innovador podría demandar un montaje fuera de lo común, pero no es el caso. Ya que a nivel técnico, este producto difiere de sus compañeros: esta evolución del S.G.A.S. (sistema inflable antiflameo) integra efectivamente dos pares de “morcillas” inflables a baja presión, que de algún modo actúan como las varillas de un paraguas: le dan forma y rigidez al cubrepiernas para que resulte cómodo en todas las condiciones. El inflado es sencillo: basta con desenroscar el tapón de las válvulas y soplar con la boca. No hace falta ninguna bomba adicional, lo cual resulta práctico. Por contra, en cuanto a la higiene a largo plazo, nos plantea ciertas dudas. Tucano Urbano explica que la válvula y los materiales empleados permiten a la versión 2.0 del S.G.A.S. garantizar una presión duradera.
Comportamiento impecable a gran velocidad
En carretera se muestra muy cómodo. La estructura cumple bien con su cometido. El cubrepiernas de moto queda bien pegado a las piernas del piloto. Por ciudad, no se mueve ni un pelo. Cogemos la autopista para probar sus prestaciones a gran velocidad. En este escenario, el comportamiento del Tucano Urbano Termoscud Evo es simplemente impecable: ¡ningún indicio de movimiento incómodo! Al contrario, a gran velocidad tiende a pegarse un poco más a las piernas, evitando la circulación de corrientes de aire… ¡Mágico!
El Tucano Urbano Termoscud Evo, ideal para la carretera, aunque adaptado a la ciudad
La rigidez, positiva para sus cualidades dinámicas, no lo es tanto en parado: el Termoscud de nueva generación obliga a contorsionarse un poco para pasar la pierna al otro lado cuando nos montamos en la scooter. Pero no os preocupéis: en ciudad se puede desabrochar el cierre de velcro a la atura del pie para poder poner el pie en el suelo cuando nos acercamos a un semáforo. En el aspecto térmico, también estamos muy satisfechos con el Termoscud, sobre todo en pleno invierno, cuando su forro aislante (fácilmente desmontable ya que se monta con botones de presión y velcros) se une al conjunto. ¡Casi parece que estamos sentados frente al fuego con una manta sobre las rodillas! Y lo mismo bajo la lluvia gracias a una membrana impermeable.
Un cubrepiernas para scooter práctico y con un buen acabado
En cuanto a los aspectos prácticos, al cubrepiernas no le falta de nada. Dispone de un bolsillo interior, que siempre es de agradecer para tener los accesorios y tickets diversos al alcance de la mano, sobre todo en las scooters que no cuentan con un compartimento tipo guantera. Se adjunta un cubresillín, ya que un paño para secar el sillín después de la lluvia resultaría insuficiente. Además, para los más exigentes, Tucano ha pensado en una cincha con un clip para abrocharse el cubrepiernas a la cintura. Su acabado también es de primera, y se ajusta perfectamente a la forma de la scooter, los perfiles cuentan con fibras reflectantes, etc.
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