Al igual que el aceite de motor, el líquido de frenos para moto es un consumible que pierde sus propiedades con el paso de los kilómetros. Por lo tanto, es necesario purgar los frenos periódicamente, como mínimo cada dos años. Dicho esto, si le das un uso muy frecuente a la moto, no dudes en hacerlo más a menudo.
Cómo purgar los frenos de la moto: pasos a seguir
- Preparar las herramientas y un recipiente para recoger el líquido de frenos
- Proteger la moto de posibles salpicaduras de líquido de frenos
- Abrir el depósito del cilindro maestro, extraer el líquido usado y limpiar
- Llenar el depósito con el líquido de frenos nuevo
- Instalar un tubo en el tornillo purgador de la pinza
- Purgar el líquido de frenos accionando la palanca de freno y aflojando el tornillo purgador para drenar el líquido usado del circuito de frenos
- Reestablecer el nivel de líquido de frenos en el depósito y repetir la operación #6 hasta que el líquido esté limpio y sin burbujas
- Nivelar el líquido nuevo en el depósito y cerrar
- Limpiar las piezas y superficies manchadas con líquido de frenos
- ¡Comprobar el frenado antes de salir!
Una operación bastante fácil, excepto si tu moto tiene un frenado CBS
Purgar los frenos es una de las operaciones mecánicas más simples de realizar, siempre y cuando se sigan los consejos que detallamos más abajo. Si tienes un sistema de frenado combinado delantero-trasero (tipo Dual CBS Honda), puede que sea más complejo. En este caso, te recomendamos contactar con un profesional.
Purgado de frenos al detalle
1 – Preparar el material necesario
Empieza por reunir las herramientas necesarias para la operación: el destornillador y las llaves habituales, un tubo transparente, si es posible una jeringa para aspirar el líquido de frenos usado, un recipiente de plástico para el líquido purgado, el limpiador de frenos y unos trapos.
A continuación, prepara el recipiente donde recoger el líquido de frenos usado. Puede servir, por ejemplo, un bote de líquido viejo. Haz un agujero en el tapón, lo suficientemente estrecho para que el tubo no se salga. Vierte un poco de líquido de frenos en el fondo del recipiente, ciérralo e introduce el tubo hasta que el extremo esté sumergido.
En lugar de este recipiente, también se puede usar un sistema de purgado más elaborado con una válvula de retención, lo cual facilitaría el proceso. Y si tienes varias motos, incluso puedes optar por un purgador de circuito de frenos neumático, una herramienta generalmente reservada a profesionales.
2 – Proteger la moto de posibles salpicaduras de líquido de frenos
El líquido de frenos es muy corrosivo. Incluso tomando las máximas precauciones durante las diferentes etapas del purgado de frenos, lo ideal sería proteger las superficies más expuestas a salpicaduras. La pintura del depósito, por su cercanía, forma parte de esas zonas más frágiles que hay que cubrir muy bien. Coloca también un trapo alrededor del depósito para evitar que se derrame el líquido, y así tendrás menos que limpiar al final.
3 – Vaciar el líquido usado
Abre el depósito del líquido de frenos. Para ello, utiliza el destornillador adecuado. Lo que no queremos es estropear de forma irremediable los tornillos que lo mantienen (especialmente en los depósitos integrados en el cilindro maestro, los cuales tienden a griparse).
A continuación, retira el líquido de frenos usado. Te puede ser muy útil una jeringa pero si no tienes una a mano, se puede bombear el líquido con un paño absorbente, por ejemplo. Limpia bien el interior del depósito para que no quede ningún resto.
4- Llenar el depósito con líquido nuevo
Esta etapa es muy importante. Durante el purgado, el líquido que añadas reemplazará al antiguo. En caso de que lo olvides, aparecerán unas burbujas de aire en el circuito de frenado, y perderás tiempo (y líquido) para conseguir expulsarlas.
5 – Instalar el tubo y el recipiente
Ahora, en la pinza de freno, retira el tapón de goma que protege el tornillo purgador y coloca primero la llave plana (extremo cerrado). En segundo lugar, conecta el conjunto de tubo + recipiente al tornillo.
¡Y ya está todo listo para empezar a purgar el líquido de frenos!
6 – Purgar el líquido de frenos
Acciona la palanca del freno (o el pedal si es el freno trasero) como si estuvieras frenando, y después afloja el tornillo purgador de la pinza con la llave plana. En la palanca notarás que la presión se ablanda y el líquido del circuito se escapa al recipiente, reemplazado por el nuevo líquido vertido anteriormente en el depósito. A continuación, vuelve a apretar el tornillo sin todavía soltar la palanca, para evitar que entre aire en el circuito.
Recuerda que vendemos tornillos purgadores de recambio, en caso de que al aflojarlo tengas algún problema.
7 – Verificar el nivel y completar el purgado
Repite la operación hasta que se vacíe el equivalente de uno o dos depósitos de líquido de frenos por pinza. El líquido del tubo debe ser transparente y sin burbujas, por eso es mejor usar un tubo transparente. No olvides ir comprobando el nivel de líquido en el depósito, ya que desciende a medida que avanza el purgado y, si es necesario, añade de vez en cuando.
8 – Cerrar el depósito y revisar
Comprueba el nivel de líquido de frenos final en el depósito y ciérralo. No te olvides del cierre de seguridad que tienen algunos depósitos.
A continuación, prueba la sensación en la palanca de freno: en ningún caso debe ser esponjosa, sino firme.
9 – Limpiar las manchas de líquido
Ya puedes desmontar el tubo y volver a poner el tapón de goma en el tornillo purgador. Intenta que se salga el menos líquido posible.
Con un paño limpio, elimina los residuos de líquido en la pinza, la rueda, el depósito y cualquier otra superficie que pueda haberse manchado. Con un limpiador para frenos, la pinza te quedará como nueva.
10 – Comprobar el frenado de la moto
Una vez purgados los frenos, y antes de salir a la carretera, no olvides comprobar la frenada de tu moto a baja velocidad para asegurarte de que todo está en orden.
¿Por qué purgar los frenos de la moto?
El líquido de frenos es un fluido muy particular; es incompresible y cuenta con una viscosidad adaptada a la transmisión de la fuerza desde la palanca hasta las pastillas. Su desventaja es que es hidrófilo, es decir, que absorbe fácilmente la humedad, la cual reduce su incompresibilidad. En el peor de los casos, en frenados muy fuertes, lo que puede ocurrir es que el líquido se caliente y el agua se evapore, deteriorando la calidad del frenado. Dicho esto, por carretera es raro que se produzca tal calentamiento. Purgar los frenos es la única solución para remediar este “desgaste” inexorable.
¿Qué líquido de frenos utilizar para mi moto?
El líquido de frenos responde a normas precisas decretadas por el Department Of Transportation (DOT) estadounidense, el equivalente de nuestro Ministerio de Transportes. Sin embargo, existen distintas calidades de líquido de frenos, que responden a distintas exigencias: DOT 3, DOT 4 y DOT 5.1 principalmente para motos. Para saber cuál usar al purgar los frenos, revisa la tapa del depósito de líquido: ¡está claramente indicado! Todo lo que tienes que hacer es elegir el líquido de frenos adecuado 😉
Espero que este tutorial te haya ayudado a purgar con éxito los frenos de tu moto. Si tienes alguna pregunta adicional, ¡quedo a tu disposición a través de la sección de comentarios de este artículo!
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