Tutorial #22: Ajustar los mandos de la moto

Dicen que la moto es una extensión de uno mismo. Pero, ¿sabías que se puede afinar aún más esta comunión física con unos pocos ajustes? En este tutorial, te presentamos los pasos a seguir para optimizar la ergonomía de tu moto. Ya verás que ajustar los mandos de la moto es facilísimo.

Ajustar los mandos de la moto es, por supuesto, una cuestión de confort. Pero este proceso en busca de ergonomía te permitirá también reducir algún que otro problema mecánico. Especialmente los relacionados con el cambio de marchas, algo que se puede prevenir fácilmente. ¡Ya me contarás!

Colocar la moto sobre un caballete

Antes de empezar, lo ideal es poner la moto recta sobre el caballete central o, a falta de este, sobre un caballete de taller. De esta manera, podrás sentarte en la moto en tu posición de conducción habitual, y así ahorrar tiempo.

Regular la maneta de freno

Comienza por regular la maneta de freno. Juega con la inclinación de la maneta de forma que los dedos estirados estén en la línea de prolongación del brazo. En algunas motos, es necesario inclinar todo el conjunto del manillar, pero en otras se puede girar directamente el soporte de la maneta.

La separación de la maneta también es importante. Pero es muy fácil modularla: basta con girar la ruedecilla de ajuste situada en la base de la maneta. Colócala de forma que seas capaz de agarrar la maneta con la segunda falange. ¡Esto te garantizará una sujección perfecta!

Regular el juego del puño del acelerador

Entre los ajustes cuyos beneficios se subestiman mucho, está el del juego del puño del acelerador. Si hay demasiado juego, no será intuitivo acelerar. Y, al contrario, si es demasiado escaso o no hay juego, también plantea problemas: la moto corre el riesgo de acelerar completamente sola con un giro brusco, por ejemplo. Para ajustarlo lo mejor posible, regula las ruedecillas de ajuste que se encuentran al final de la cubierta del cable del acelerador.

Para un funcionamiento óptimo, la rotación del puño debe ser muy fluida. También debe volver a su posición original cuando la sueltas, de un golpe y no poco a poco.

Cuando hayas terminado, arranca la moto y asegúrate de que todos estos ajustes no cambian cuando gires el manillar de forma brusca a un lado o al otro. En caso contrario, vuelve a ajustarlo.

Regular el juego del embrague

Si tu moto dispone de un embrague por cable, y no hidráulico, un buen ajuste del juego de la maneta puede cambiarte la vida. Con demasiada suavidad, la caja cruje en los cambios de marchas. Y, con demasiada tensión, el embrague patinará en las aceleraciones más fuertes. En los dos casos, estás haciendo sufrir a la mecánica de tu moto. ¡Pero con unos pocos ajustes se arregla! Atención, el juego puede disminuir en caliente, así que vuelve a comprobarlo después de unos kilómetros.

Ajustar el selector de marchas y el pedal de freno

¡Ahora vamos a por el selector! Lo mejor sería llevar puestas tus botas de moto habituales para que los ajustes que realices sean perfectos. Deberías poder deslizar el pie izquierdo sin demasiadas contorsiones bajo el selector. Cuidado que no sea excesivo tampoco en el sentido contrario: si tienes que levantar mucho el pie para subir una marcha, es que está demasiado alto. Mi consejo para lograr una buena posición: cuando deslizas la bota sobre la estribera, debe pasar naturalmente sobre el selector, sin chocar contra él.

Existen dos tipos de selectores: los que están montados directamente sobre el eje estriado y los que cuentan con una bieleta intermedia. En el primer caso, retira el selector y colócalo de nuevo en la posición que mejor te vaya. Si es del segundo tipo, afloja la contratuerca, gira la bieleta hasta encontrar el ajuste correcto y vuelve a apretar.

Para el pedal de freno, vamos a buscar la misma posición que para el selector, justo bajo la suela de la bota. También en este caso, juega con la bieleta para modular la altura.

Con todo esto, ¡tu moto debería ser todo un modelo de ergonomía! Como siempre, a la menor duda, no dudes en comentar, haremos todo lo posible por ayudarte.