PROTECCIÓN A CAMBIO DE NUEVAS RUTINAS

Aquí es donde las chaquetas con un sistema «completamente integrado» suman puntos. Al final, probablemente sea la solución menos engorrosa, porque aparte de la cuestión de la batería, nada la diferencia en términos de uso de cualquier otra chaqueta de moto.

Como he evocado antes brevemente, cada sistema tiene sus ventajas y desventajas. Para un airbag con cable, hay que recordar engancharlo al subirte a la moto y desengancharlo cuando llegues a tu destino. Asimismo, en el caso de los airbags autónomos o de doble sensor, será necesario comprobar periódicamente que la batería está cargada (generalmente a través de un puerto USB).

Aparte de eso, lo que más puede desanimarte es usar un elemento adicional, especialmente cuando ya estás bien equipado de la cabeza a los pies.

Es cierto que los airbags integrados (chaquetas y monos airbag) tienen actualmente un precio muy superior al de un chaleco, pero hay que compararlo con un conjunto «chaqueta + chaleco airbag». Y no hay duda de que los precios bajarán rápidamente en los próximos años. Mientras tanto, el chaleco sigue siendo la solución más asequible en este momento.

Con la ayuda de la democratización y miniaturización de las tecnologías, los sistemas de detección y despliegue son ahora muy compactos y la incomodidad es bastante relativa. Los chalecos son muy ligeros y no limitan los movimientos en la moto, y por otro lado ofrecen unos tiempos de puesta a disposición bastante correctos.

A pesar de que hace unos años no era posible, la mayoría de los airbags de moto del mercado hoy en día permiten llevar una mochila.

Eso sí, con cierta precaución... Evita sobrecargar la mochila (no más de 8 kg, recomendados por In&Motion por ejemplo).
Deja las correas lo suficientemente flojas para que puedas pasar un puño (en su parte más ancha) entre el hombro y la correa.
Asimismo, es mejor no cerrar las correas de pecho y/o abdomen para liberar espacio en caso de una activación del airbag.

En cuanto al mantenimiento, nada de meterlo a la lavadora como harías con la equipación textil convencional. Habrá que conformarse con un lavado «a mano». Para el sistema de inflado, aunque el usuario lo puede restablecer después de su uso, será necesario verificar el estado del cartucho (ausencia de puntos de corrosión) una vez al año, así como su peso (margen de tolerancia +/- 2g en comparación con el peso indicado) para asegurarse de que no haya micro fugas.

Si es necesario devolver el airbag a fábrica, deberás enviarlo para una inspección periódica. Por ejemplo, en Dainese, el intervalo de inspección es de 5 años.

Asimismo, esta nueva equipación representa un coste importante en el presupuesto de un motero, al igual que el casco, la chaqueta, los guantes, etc.

Mi mejor consejo es integrar el coste de la equipación elegida en el presupuesto para la moto. Algo a tener en cuenta, en particular los principiantes que a veces dedican más presupuesto a la compra de la moto y a equipación obligatoria «a la última» en detrimento de equipación adicional (calzado, pantalones, etc.).