A la hora de transportar un antirrobo en moto, la tentación de utilizar una mochila es grande. Por desgracia, vuestra columna vertebral no está hecha de adamantium. Meter su U, su cadena o su bloqueo de disco en una mochila no es una buena idea: en caso de caída, lo que se deformará no es precisamente la mochila…
Seguramente os digáis: « Vale, muchas gracias por este discurso tan edificante, pero, si existiese una solución milagrosa para transportar un antirrobo en moto, ya la conocería… ». Viendo el anoréxico volumen del compartimento que la mayoría de las motos tienen bajo el asiento, no me queda más remedio que daros la razón.
Sin embargo, existen algunos paliativos, en ocasiones económicos, para llevar vuestro indispensable antirrobo con vosotros allá donde vayáis.
He aquí un pequeño inventario de las soluciones para transportar un antirrobo en moto, de la más económica a la menos económica:
- Directamente en vuestra moto
- Red tipo «tela de araña»
- Soporte específico
- Parrilla Givi M6M Monolock
- Accesorios de equipaje
- Opción « segundo antirrobo »
Transportar el antirrobo directamente en la moto
Al decir esto, seguramente me gane el apodo de captain obvious. No entraré a valorar el compartimento bajo el asiento, ya que es demasiado pequeño y, en muchos casos ni siquiera existe. Aun así, existe una posibilidad de instalación en vuestra propia moto, sobre todo si vuestra montura es una roadster. Al llevar sus tripas y su esqueleto al aire, os ofrecerá numerosos puntos de enganche:
- marco
- curva del subchásis
- suportes de las estriberas
- portaequipajes
- asas de pasajero
- etc.
Probad a introducir vuestra U o enrollar vuestra cadena por diferentes lugares, hasta encontrar la ubicación perfecta. Atención: por motivos de seguridad obvios, el antirrobo no debe entorpecer ninguna pieza móvil (amortiguador, bieleta, etc.), ni tampoco correr el riesgo de desplazarse durante el trayecto.
¿Habéis examinado todos los recovecos de vuestra máquina y no habéis encontrado un lugar convincente para vuestro antirrobo? ¡Probad con la red tipo «tela de araña»!
Red tipo «tela de araña»: práctica y barata
Si conducís sin pasajero, la red tipo «tela de araña» es una buena solución para transportar un antirrobo en la moto. Esta malla elástica resistente y provista de ganchos pronto se convertirá en un accesorio indispensable para la vida diaria.
La red tipo «tela de araña» ocupa poco espacio, no pesa nada, cuesta tan solo unos pocos euros y resulta muy práctica en cuanto surge un problema para transportar objetos. Gracias a ella, llevar consigo un casco, un paquete o… un antirrobo se convierte en una mera formalidad.
Hay que empezar siempre por introducir el antirrobo a través de las mallas de la red. Pasad varias veces del interior al exterior a fin de fusionar bien ambos elementos y, a continuación, cerrad vuestra U o vuestra cadena. Por último, fijad los ganchos de la red para tensar suficientemente el conjunto e impedir cualquier movimiento del objeto transportado. ¡Eso es todo!
Soporte específico: Una opción disponible para (muy) pocas motos
Siempre que tengáis la suerte de conducir una de las motos compatibles (como la Yamaha MT-09 de la foto), algunos fabricantes os ofrecen soportes de antirrobo específicamente estudiados para montarse en el cuadro o en el soporte de estribera del pasajero.
Por algo menos de cuarenta euros, dispondréis de un espacio seguro con el que protegeréis la pintura de vuestra querida montura y los pies de vuestro copiloto. Como veis, es una solución de lo más práctica.
Eso sí, tampoco esperéis milagros en cuanto a la integración con las líneas de la moto… ¡No se puede tener todo!
Parrilla Givi M6M Monolock: ¡simplemente genial!
No me extenderé mucho en este accesorio genial, puesto que la platina Givi M6M Monolock ya ha sido objeto de un artículo completo. Podemos resumir diciendo que, si formáis parte de los afortunados propietarios de un top case Givi de la gama Monolock, os bastará con sustituir la parrilla estándar por el modelo M6M.
Tiene un mayor grosor, pero os ofrece un compartimento donde podréis transportar un antirrobo para moto de manera completamente transparente, ¡con o sin top case!
Guardar vuestra U, vuestra cadena u otro antirrobo en un portaequipajes
Nuevamente, navegamos por las cálidas aguas del sentido común… Si ya utilizáis un top case, una maleta o una bolsa a diario, seguramente tengáis dentro de ellos un sitio reservado para vuestro antirrobo. Si no es vuestro caso y ninguna de las soluciones anteriores os ha convencido (lo cual es perfectamente legítimo), ¿os habéis planteado comprar una bolsa?
Una bolsa de sillín o una bolsa sobredepósito de gama básica solo cuesta unas pocas decenas de euros y pueden instalarse en cualquier moto. Vuestro antirrobo viajará la mar de bien en ellas. Además, nunca viene mal un poco más de espacio de almacenaje…
Si contáis con algo de margen en vuestro presupuesto, modelos como los Tanklock de Givi (¡otra vez ellos!) o el equivalente de Shad os resultarán muy prácticos en el día a día.
Dejar un segundo antirrobo en el trabajo
Es la solución más costosa que encontraréis en esta página. Aprovechad alguna oferta (precisamente, mientras escribo esto, nos encontramos en plenas rebajas) para equiparos con un segundo antirrobo. Dejadlo en el aparcamiento del trabajo, sobre todo si está vigilado (nunca hay que descartar que algún pillo manipule el antirrobo en vuestra ausencia). De esta forma, os libraréis por completo del problema: ¡ya no hará falta que transportéis vuestra U o vuestra cadena a diario!
Si esta opción os atrae, os aconsejo también que llevéis un bloqueo de disco guardado bajo el asiento. Cuando alguna vez tengáis que parar de manera imprevista, os permitirá inmovilizar vuestra moto durante unos instantes. Kooroom tiene modelos con homologación SRA por menos de 30 €.
Estas son todas las soluciones que me apetecía compartir con vosotros. Utilizad los comentarios para hacernos llegar todas las precisiones que estiméis oportunas, sobre todo si tenéis alguna idea que no hayamos citado para transportar un antirrobo en moto.
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